Eugenio Espejo : médico y duende

Homenaje al Bicentenario de la Emancipación

Esculapio, hipócrates, Galeno, Avicena y Averroes, se vinen América -- Radioscopia de la vida del Quito de 1747 -- El lío de unas fechas y de unos nombres -- Hace mejor el negocio de los otros que el suyo propio -- Uno contra todos y todos contra uno -- Por qué el duende no trajo matrimonio -- Espadachín por todo el mundo encerrado en su posada -- Las veredas y los senderos de la facultad de medicina -- Un hospital con tres mil estudiantes -- Tutilimundis de ayer y de hoy -- El infeliz oficio de circuforantos en el rancio -- De la independenca a la penicilina -- Espejo estudia medicina y se convierte en doctor -- Un título de médico con el tizne de la reprobación --Un libro serio y profundo escrito en veintiún días -- Un duende salva el libro del duende capitán -- Las ideas de Espejo esciben al alfa de nuestra medicina -- Las virulas son las peores enemigas de la belleza -- Poblar es gobernar, se dijo en Quito hace 160 años -- Uno de los primeros soñadores en la cacería de microbios -- Una esplédida historia universal de las viruelas -- Un poste y una argolla para la higienización de Quito -- Espejo, el más terrible Bolchevique de la colonia -- Un pueblo que se alimentó mal y sigue así mismo -- Sigue contagiando las enfermedades contagiosas -- Introducción al tomo cuarto de la historia de González suárez -- Europa mejor: como chusig, como duende y como médico -- La homilía que endereza a gentes e instituciones -- La tenencia de protomedicato en Quito -- El pasquinero y el corsario de la cultura y la libertad -- Un duende que escribe horrores en las paredes -- El gran ideario de los hermanos Espejo -- Ingreso en el registro Mortuorio de indios, cholos, zambos y mestizos -- De la visibilidad de duende a la eternidad del mármol,